Es momento de ayudar al planeta y reducir el consumo de carne es una de las cosas más fáciles que todos podemos hacer.

Si estás en estas andadas, te tenemos 3 consejos que son esenciales y que te ayudarán a realmente reducir tu consumo de carne. 

Sí, todos sabemos que debemos empezar a cambiar nuestros hábitos alimenticios poco a poco, pero más allá de eso, pon atención a estas 3 cosas:

Consejo #1: No querer engañarte de que estás comiendo “carne”

Una lasaña de espinacas es tan deliciosa como una lasaña de carne.

Uno de los principales errores que cometen las personas que desean reducir su consumo de carne o que quieren ser vegetarianos a full, es tratar de preparar platillos de carne, pero sin carne. Es decir, buscar que sus nuevos platillos sepan a carne. 

Esto es un error porque vivir comparando la comida y queriendo conservar el sabor de la carne te llevará a frustrarte y terminarás regresando a tu consumo habitual. Lo que debes saber es disfrutar los platillos vegetarianos por los sabores que ellos tienen, sin querer que te sepan a carne. 

Los vegetales, granos, semillas, legumbres y demás, pueden crear platillos realmente deliciosos. Te sorprenderás, solo dales una oportunidad y deja de querer que tengan sabor a carne. 

Consejo #2: Olvídate de las ensaladas, aunque el propósito sea reducir tu consumo de carne

Unas deliciosas enmoladas pueden ser parte de tu menú vegetariano.

Bueno, no las olvides por completo pues son buenísimas para la salud, a lo que nos referimos es que dejes de pensar que no comer carne se reduce a comer pura ensalada. Las ensaladas pueden ser deliciosas, pero, seamos honestos, comerlas diario es aburrido. 

Ser vegetariano no significa comer solo ensaladas y vegetales. Hay un montón de cosas más que puedes comer sin carne. Por ejemplo: enchiladas o enmoladas de queso, tacos dorados de papa, lasaña de espinaca, y un largo etcétera. 

Sí, trata de incluir varias veces a la semana ensaladas, pero no te estanques en solo comer eso pues te aburrirás rápido y cuando menos te des cuenta estarás de regreso comiendo carne igual que antes. 

Consejo #3: Haz menús semanales y dedícate un día completo a cocinar

¿Qué tal echarte unos taquitos dorados de papa con su salsita verde?

Lo mejor que puedes hacer para realmente cumplir con tu misión de reducir tu consumo de carne es planear tu menú de la semana y dedicarte un día completo a cocinar los diferentes platillos que estarás comiendo ese día. 

Si cocinas platillos ricos sin carne y los tienes ya listos para solo calentar y comer, te será mucho más fácil lograrlo. No te comerán las prisas de no saber qué cocinar, por lo que no terminarás haciendo una simple ensalada o salir corriendo a comerte unos taquitos porque no tienes nada qué comer en tu casa.

Un menú vegetariano para una semana puede ser algo así:

  • Arroz rojo
  • Sopa de fideo
  • Enchiladas verdes rellenas de queso
  • Chimichangas de espinaca con champiñones y guacamole
  • Tarta de pimientos con queso
  • Tortitas de plátano macho rellenas de frijoles refritos

¿Qué te parece? Nada mal, ¿no? Esto es un menú de una semana totalmente delicioso. 

No es nada difícil reducir el consumo de carne si realmente tienes las ganas de hacerlo. Si estás acostumbrado a preparar tu comida, sí, al principio deberás dedicarle más tiempito a la cocinada, sobre todo a la planeación de los platillos. Pero cuando tengas cosas súper ricas para comer toda la semana sin carne, verás que cada minuto invertido habrá valido la pena. 

Si más bien estás acostumbrado a comprar comida preparada, entonces te será más fácil, pues solo debes elegir platillos sin carne.

Como lo veas, no es nada difícil y mucho menos si tienes la convicción de hacerlo.

El planeta y los animalitos nos necesitan, pongamos nuestro granito de arena haciendo lo que está en nuestras manos.