Estamos de acuerdo en que esto debería ser la excepción y no la regla, tener un amigo que se la pasa pidiéndote prestado como si fueras su banco personal no es remotamente lo más idóneo y probablemente no seas el único al que se lo hace, así que cobrar ese dinero es la única opción.

La situación está más o menos así: cada quincena tienes que cobrar dinero a un amigo que te debe pero no solo no te paga aunque le cobres todo el tiempo sino que se la pasa subiendo fotos a su Instagram donde muestra señales de no solo tener todo lo que te debe sino hasta más de lo que tienes tú. Casi casi que come en puro restaurante caro, se viste con ropa de diseñador y vive en la Condesa pero casualmente no tiene para pagarte. Toma nota, hemos pasado por eso y te decimos que hacer para que pares de sufrir por tener que cobrar dinero.

Tienes que olvidarte de la pena de cobrar tu dinero

Es cierto que siempre eres el buena onda de tu círculo de amigos y que no te gusta fallarle a la gente pero para cobrar dinero que te deben, debes dejar de lado la timidez. La misma facilidad con la que abriste tu aplicación del banco para transferir el dinero que le prestaste a tu amigui, es la misma que debes de tener para decirle expresamente: Es hora de que me pagues el dinero que me debes. 

No le estás pidiendo un favor, ¡tú ya le hiciste uno! y le toca cumplir con su parte del trato. Recuerda el capítulo donde Bob Esponja aprende a ser asertivo.

 Hazle recordatorios antes del momento de cobrarle el dinero

Queremos ser buena gente y pensar que tal vez tu amigui no te paga porque no se acuerda. Suele haber casos donde la persona está muy distraída y simplemente se le olvida que debe pagarte el dinero que te debe. Recordarle días previos a la fecha en que te dijo iba a devolverte el dinero puede ser de gran ayuda ya que tendrá en mente que una parte de su dinero no será para gastar sino para pagarle a quien le ayudó en un momento de necesidad. 

Amistades se han perdido por tener que cobrar dinero. De verdad esperamos que no sea el caso.

Dale un plazo definido para el préstamo desde el comienzo

Sí, sabemos que tienes corazón de pollo y eres un amigo muy leal y servicial, pero eso de pedir que te paguen cuando puedan o cuando tengan es bastante ambiguo. Es de hecho casi una invitación a que no te paguen el dinero que les estás prestando. Se presta a pensamiento del tipo: mi cuate no necesita el dinero así que puedo volver a pedirle de nuevo. 

Lo ideal es que le des una fecha que factible para que te pueda pagar pero sin que tú tengas que recurrir a ajustar tu presupuesto del mes solo porque te falta ese dinero. 

Acuerden un plan o método de pago

Esto es ser sumamente bondadoso con los pagos, las fechas y el costo de los abonos que te puede dar. Eres tan bueno que seguro terminaste por cobrar tu dinero en abonos más chiquitos que Ricardo Salinas Pliego en Elektra. Le haces un plan de pago a tu amixen las parcialidades más cómodas y microscópicas. Si aún así no te paga, es importante que en el acuerdo hayan aclarado tener las fechas de pago con regularidad. 

Tip salvavidas: que te deje una prenda en garantía o empeñada y si no puede pagarte el dinero entonces se vuelve tuyo. 

Please, no seas tan buena gente como para devolverle el pago en especie, ambos sabemos que una buena parte de todo lo que se compra no era necesario. 

Pregúntale si está todo bien en casa

Obvio suena como un meme del internet pero acéptalo, quizá no le está yendo bien y las fotos que sube a su instagram son solo porque lo invitan o puede que se haya quedado sin trabajo y de hecho le vaya peor. 

Esto no quiere decir que a tu amix no le parezca mala idea vivir de la caridad y le pida prestado a medio mundo en lo que encuentra un trabajo pero puede que saque más dinero en sus recaudaciones y debiendo a medio mundo que en su siguiente trabajo godín. 

Si no es mucho, entonces puedes cobrar dinero de otras formas 

Y no, no estamos hablando de que le hagas el cobro en cuerpomático, más bien el plan es que salgan a comer y antes de que traigan la cuenta, te despidas diciéndole que no puedes pagar pero que se lo encargas y que con eso queda saldada la deuda. 

Si se gastaron más de 400 pesos en un bufete, seguramente se sentirá aliviado de no deberte esa misma cantidad de dinero nunca más. 

Otras cosas que puedes hacer es mandar a un amigo de intermediario, de preferencia alguien que le caiga bien o que sepas que es alguien a quien respeta y le haría caso sin rechistar. Ya sea que tengas que recurrir a su mamá o a su crush, seguramente hará que te lo devuelva. 

Si la cosa ya está muy extrema y ya te hartaste de cobrar dinero en vano cada quincena para encontrarte con puras excusas, etiqueta a tu amigo el deudor en un meme como este en el feis para ver si la vergüenza pública le mueve tantito.

En último caso, si de verdad no logras que paguen, da por perdido ese dinero y mantente muy fuerte la próxima vez que vaya a pedirte y termines aceptando convertirte en un  prestamista. Aprende que no debes prestar lo que no tienes (porque acabarás debiendo a otros por ese cuate que no te paga). Hasta cierto punto, cada que prestes algo debes tener en cuenta la posibilidad de que no te lo devuelvan. Así sea un libro o un buen varo.

Si tu amigo está en esa situación porque se enfrenta a la deuda de una tarjeta de crédito o simplemente porque eso de andar organizando las finanzas se le hace muy difícil y prefiere vivir al límite, recomiéndale nuestros artículos.