Si en los dosmiles estabas en la flor de la adolescencia y eras marginado social por coleccionar figuras de anime, ser el “sabelotodo” del salón o el único friki de tu salón que no jugaba al fifa, entonces es momento de enfrentar la realidad: tus gustos han saltado al mainstream gracias a internet y las redes sociales.

Es muy chavorruco de nuestra parte preguntarte pero ¿estás seguro de saber qué es una “e-girl”? ¿No te molesta que a “la chaviza” ahora le gusten los animes que tardabas en conseguir para verlos en tu DVD? Ni hablar de que los niños que juegan al Fornite sean la nueva generación de los que antes comían queso y hacían raps de Minecraft. Bueno, la popularización de tus hobbies no sucedió de la noche a la mañana, pero mucho de eso tuvo que ver con el internet y de eso hablaremos aquí. 

Los otakus emergieron a la superficie y la dominaron

Aunque el término en las lejanas tierras japonesas hace referencia a los fans from hell del anime, en latinoamérica se ha extendido su uso para nombrar a los fans de aquello que esté relacionado con el anime y manga. Su popularidad comenzó a crecer gracias a la creación de grupos en Facebook que más tarde terminarían por convertirse en verdaderas marabuntas online. 

El fenómeno en masa que representa el anime y la cultura otaku no habrían alcanzado a su público si no fuera por todas esas cadenas de televisión que le apostaron a poner “monas chinas” en el horario adecuado o que tu amigui de la secu viera Naruto por primera vez y desde entonces hiciera el oso de correr como “ninja” por la escuela.

La realidad es que más gente comenzó a establecer lazos a través de los eventos presenciales, las convenciones en las que seguro veías más de un cosplay súper elaborado y cool o algunos que están para memes hoy en día. Y ese fue también otro de los grandes impulsores de su popularidad: El cosplay, que comenzó a hacerse de adeptos que nunca habían visto anime gracias a las increíbles creaciones que lucían cosplayers que abarrotaron instagram desde hace años. 

Hace tiempo que ser nerd comenzó a volverse cool

Cuando se lanzó The Big Bang Theory, uno de sus slogans era Nerd is the new sexy, y no se equivocaron al vendernos esa idea en la que un chico con playera divertida, lentes de pasta y que ama Dungeons and Dragons no pueda parecerle sexy a una chica súper popular. 

Eventualmente comenzaron a emerger los sapiosexuales, es decir, la banda que se siente atraída hacia ti porque le explicas la teoría de cuerdas y el resto de la mecánica cuántica sin que precisamente te entiendan, pero hey, eres una colección de datos interesantes que pueden no solo ser de un campo en específico. Probablemente Dr. House también tuvo que ver aquí.

Aunque puede que sus grupos sociales estén prestos de alguna forma a querer hacerte un examen de admisión para saber si eres digno de formar parte del club, lo cierto es que ¿quién no se ha topado por ahí un meme con la marca de agua memes literarios?.

Quizá otra de las causas por las que ser nerd se ha vuelto tan popular es por el auge de los aesthetic surgidos en Tumblr, que giran alrededor de lo bien que luce aquello que rodea a los nerds. 

Y por si fuera poco, el conocimiento se ha hecho de mucho más fácil acceso para todos, iniciar un canal de YouTube sobre divulgación científica es una forma de ser cool y nerd at the same time (te recomendamos estos canales sobre divulgación científica bien cool, y sigue a @soynicosastre en TikTok).

Ser friki es lo de hoy

Un friki es más esa mezcla de aficiones que hasta hace una década no eran muy cool: los cómics, los videojuegos, los juegos de rol, los juegos de mesa, ser fans acérrimos de la ciencia ficción y la fantasía épica.

La verdad es que alguien puede ser friki solamente de una cosa, como de Star Trek o El señor de los anillos, sin embargo la cultura friki encontró su apogeo en el boom de cine de superhéroes de Marvel, el hit enorme que fue la saga de Harry Potter o más recientemente con la cantidad de audiencia que tuvo Game of Thrones. 

Aunque si nos damos cuenta, a lo largo de la década del 2000 y sobretodo la del 2010, comenzamos a ver con frecuencia más personajes de la televisión raritos con los cuáles encajar y se abrieron las puertas a otros tipos de frikis, como las fans del Kpop que si se unen y lo desean, dominan el mundo o lo que se propongan. 

¿Te sientes parte de alguno de estos grupos sociales? Quizá has crecido por tanto tiempo siendo fan de la cultura pop, que se te hace lo más normal del mundo o quizá tu caso particular es el de sólo sentirte muy viejo para estar a la moda con la chaviza o muy molesto porque los jóvenes de ahora están echando todo lo bueno a perder. No te preocupes, seguro que un día de estos la tía Paty Chapoy termina explicando el final de Neon Genesis Evangelion en su programa Ventaneando.


Disfruta de tu rareza porque es un hecho: los millennials (y la generación Z que nos anda pisando los talones) preferimos mil veces gastar nuestro salario precario en cosas infantiloides y frikis que nos hacen felices en vez de tener hijos. Beneficio número 8,567 del estilo de vida child free.